Sanciones e ineficiencia gubernamental afectan vacunación contra la COVID-19 en Venezuela

 


CARACAS—La pandemia de la covid-19 avanza en el país sudamericano, quien arriba a los 355.061 casos de contagio y 4.301 personas fallecidas para la fecha del domingo 19 de septiembre según reportes de las autoridades sanitarias de Venezuela. La crisis capitalista mundial ha generado grandes consecuencias en la población venezolana, quien padece producto a la falta de acceso a los alimentos, medicinas, insumos médicos y el deterioro de los principales servicios básicos (agua, transportes, electricidad, gas doméstico) situación que ha conllevado a la agudización del estilo de vida con la llegada de la pandemia en el año 2020.

En la actualidad Venezuela arriba a los 550 días de pandemia luego de haber diagnosticado el primer caso de contagio el 13 de marzo de 2020, en el que fueron suspendidas las actividades presenciales en el sector educativo y económico en todo el territorio nacional. Posterior a tres meses fueron restituidas en el denominado esquema de flexibilización 7×7 para los sectores de prestación de servicios y de comercio, así como el establecimiento del sistema de educación a distancia “Cada Familia una escuela y Universidad en Casa” altamente cuestionado por la población venezolana por el detrimento en la calidad educativa producto de la poca disposición de recursos tecnológicos de docentes y estudiantes, la disminución de las salario y las contantes fallas o la inexistencia de internet en las zonas populares.

Desde el arribo del primer lote de vacunas rusas Sputnik V el 13 de febrero del 2021, Venezuela ha recibido más de 11 millones de dosis de las vacunas contra la covid-19 entre ellas la Sputnik V, vero cell Sinopharm y la cubana Abdala en lo que arroja según cifras publicadas por el ministerio de salud 4.271.397 vacunadas para la fecha.

El acceso a la adquisición de vacunas por parte del gobierno de Nicolás Maduro, es objeto de numerosos señalamientos de diversos sectores políticos y gremiales que acusan a la gestión gubernamental de la ineficiencia en la rápidas de las instituciones para brindar la inmunización masiva contra la covid-19.

Delcy Rodríguez, vicepresidenta ejecutiva de Venezuela en declaración denunció el pasado 10 de junio, que bancos internacionales habrían bloqueado recursos para la cancelación al mecanismo COVAX de vacunas contra la covid-19 “han sido bloqueados por un banco internacional y están bajo investigación”.

“Con esta acción nadie puede negar que estas medidas coercitivas unilaterales son criminales”, dijo la vicepresidenta durante la clausura de una conferencia académica internacional.

Por su parte Nicolás Maduro, presidente de Venezuela informo el 5 de septiembre el arribo del primer lote de dosis del COVAX el cual cuestiono en el retraso de la entrega “Esta semana llegan las primeras vacunas del mecanismo Covax y aspiramos a que el mecanismo Covax acelere para que, en octubre, nos entregue todas las vacunas para vacunar, de acuerdo al estimado, a 6 millones de venezolanos”, dijo Maduro en una entrevista que le hizo su ministro de Cultura, Ernesto Villegas.

Tras los anuncios de Maduro en regresar a clases presenciales desde el 16 de septiembre, gremios de sectores educativos protestaron a las afueras de ministerio de educación en Caracas, para rechazar la medida de presidente venezolano debido a que consideran que no hay condiciones en los centros de estudio que brinde garantías a no contagiarse de la covid-19.

Edgar machado, dirigente sindical obrero del sector educación expresa que “el 90% de los centros educativas se encuentra en malas condiciones y le solicitamos al ministerio de educación que nos digan cuál de esas escuelas realmente les realizaron mantenimiento porque nosotros lo desconocemos”.

En una entrevista a Omar González representante estudiantil del sector salud y secretario de los servicios médicos para estudiantes de Centro de Estudiantes de la Universidad de Las Ciencias de la Salud Hugo Chávez de informó que en la actualidad han tenido dificultades para tener el acceso a los insumos médicos y equipos de protección personal ante la covid-19.

Omar plantea que los estudiantes de salud no tienen garantías reales de bioseguridad y por ello expresa que es necesario evaluar con mayor detalle el regreso a clases de los sectores y universidades.

“Hemos tenido muchas dificultades para obtener el material de bioseguridad ya que el estado no lo garantiza, por eso es necesario evaluar de manera real el regreso a clases presenciales en otros sectores y universidades ya que hace falta vacunar a muchos estudiantes” informo el dirigente estudiantil Omar González.

Ambos entrevistados aseguraron que los puntos de vacunación implementados por el gobierno nacional han estado atendiendo principalmente a los sectores de avanzada edad de manera eficiente, pero aseguran que debe masificarse en mayor presencia en comunidades y centro educativos para tener mejor acceso a las vacunas.

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